Por: Jorge Alberto Liriano Linares, Prisionero Político, desde la prisión dicta los textos.
Prisión Cerámica Roja, Camagüey/14 de Agosto/ del Buro de trabajo Hablemos Press/ Acusado de un supuesto e improbable delito de corrupción de menores, arribó el 14 de agosto, a la prisión Cerámica Roja, el ciudadano extranjero de origen canadiense Sergio Booclers, de 59 años de edad, natural de la ciudad de Quebec, el cual ha visitado la isla tradicionalmente durante los últimos 15 años en calidad de turista.
El Sr. Booclers detenido por los órganos de la Seguridad del Estado cubanos el pasado 5 de agosto alega sentirse secuestrado y que se han desestimados todos los derechos individuales y legales que le asisten como ser humano y ciudadano extranjero.
Cuando el pasado 14 de julio funcionarios de emigración y extranjería le incautaron su pasaporte prohibiéndole la salida de la municipalidad de Camagüey para posteriormente ser detenido por las fuerzas represivas de la inteligencia cubana donde le fue confiscada una cámara fotográfica y su memoria de datos.
Luego de pasar 7 días en condiciones infrahumanas en los calabozos de la tercera unidad de la policía donde fue maltratado y torturado brutalmente en los interrogatorios es enviado a la cárcel provisional donde permanece aislado e incomunicado, sin agua potable, con escasa ventilación, con pésima alimentación y a merced de la hostil represión de los militares.
Sergio Booclers es un canadiense que dice ser amigo del pueblo cubano. Durante 15 años a visitado la isla extendiendo en largo peregrinaje su solidaridad con la pobreza del pueblo.
En el barrio insalubre del Porvenir de esta ciudad de Camagüey el Sr. Booclers es reconocido por sus moradores como el enviado de Dios por sus incontables e incalculables obras de caridad que incluye entrega de juguete a los niños, ropas, zapatos y alimentos a las familias mas necesitadas, medicamentos para los enfermos y hasta materiales de construcción para las familias que quedaron sin techos al paso del ciclón Ike el pasado año que el gobierno cubano dejó abandonadas y olvidadas a su suerte.
También el enviado de Dios en el barrio Porvenir mencionó la construcción de un templo para orar a Dios, oficiado por la Iglesia Evangélica Pentecostal y a mediado con organizaciones de solidaridad humanitaria de su país para la instalación de obras sociales que permitan mejorar el nivel de vida del pueblo cubano.
Jamás imaginó este solidario y misericordioso canadiense que sus obras humanitarias en favor de los pobres en un barrio marginal de los muchísimos que abundan en Cuba lo conllevaría a conocer la naturaleza represiva del régimen y sus fragantes violaciones de los derechos humanos. Se pone de manifiesto una vez más la manipulación, la injusticia superlativa y la doble moral del gobierno cubano.
Es que como dice y razona el propio señor Sergio, durante 15 años de visita a la isla sintió en carne propia el dolor y el sufrimiento de este pueblo, conoció el verdadero rostro de la Cuba socialista, sus miserias, desigualdades y discriminaciones conoció a un pueblo hundido en la pobreza y el terror sin derechos ni libertades democráticas oprimidos, sometidos, explotados y como paradoja también usados y manipulados por el régimen y sus gobernantes.
Booclers conoce la realidad Cubana es por lo que se han ensañado ruin y cobardemente con el un nuevo golpe a la dignidad humana contra un hombre libre. Crímenes como este hacen temblar la injusticia.
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