Vivimos como animales y sin derecho a quejarnos

Sucesos narrados por la comunicadora Comunitaria Lourdes Esquivel Vieyto

En la calle 289 entre 116 y 114 en el poblado de Calabazar, municipio de Boyeros, hay tragantes que no tienen las tapas, que son como rejillas; además de estar tupidos y jamás los han destupido. Siempre se mantienen llenos de agua y eso que en la esquina hay una Escuela Primaria “Rafael María Mendive”, en ocasiones niños al cruzar han metido los pies en los huecos y todo porque no se ocupan de arreglar esta situación.

El señor Daniel Martínez Román, vecino de la zona, me comentó que hay tremenda infección en esos tragantes, que los insectos y las ratas abundan y que los trabajadores de Salud Pública no se ocupan, ni le dan importancia a esta situación, al igual que el Poder Popular.

Añade Daniel, que en este pueblo las calles son un desastre y que entre las calles rotas, los basureros y los salideros, vivimos como animales y sin derecho a quejarnos.

En estas fotos se puede apreciar un costado de la escuela y el frente.