8/18/2009

Impactado de bala un joven cuando oficiales de la PNR dispararon contra una familia.


Por: Jorge Alberto Liriano Linares, Prisionero Político, desde la prisión dicta los textos.

Camagüey, 17 de Agosto – del Buró de Trabajo de Hablemos Press- Un joven cubano resultó baleado por la fuerza represiva de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) el pasado 7 de agosto en la localidad de Camarote en el municipio Guáimaro en la provincia Camagüey.

Alien Rivero Ayala, de 20 años de edad, vecino de calle primera # 4 Camarote, Guáimaro, resultó herido de bala en el muslo de su pierna izquierda por el sud teniente Jorge Luis More Martínez oficial de la PNR quien efectuara varios disparos contra la familia del joven reunida en una fiesta.

Una bala alcanzó al muchacho. El proyectil le penetró por la parte superior del muslo y salió del otro lado sin causar daños mayores a la víctima, según el propio testimonio del herido que recién acaba de ingresar a la prisión Cerámica Roja, acusado de atentar contra las autoridades, mecanismo utilizado frecuentemente por los militares para esconder el crimen.

Fue atendido en el hospital del municipio de Nuevita, donde fue operado. La bala dañó vasos sanguíneos que le provocó una pérdida importante de sangre.

En plena recuperación sin haber reaccionado a los efectos de la anestesia fue trasladado en un carro Jipe de la policía para un calabozo de la PNR de la localidad, con el objetivo de esconder el cuerpo del delito.

Diez días en los calabozos en condiciones infrahumanas son más que suficientes para la infección de la herida que trajo como consecuencia la incapacidad de este ser humano.

Acusado también se encuentra el ciudadano Roberto Rivero Pérez, de 43 años de edad, padre de la víctima indignado y en defensa de su hijo gritó “asesinos”, “Abajo la dictadura”,” basta de crímenes” entre otras frases contrarias al horrendo crimen perpetuado contra su familia.

La violencia policial, los abusos de poder de las fuerzas represivas a los servicios de régimen de la isla aumentan por día. La policía empuña y disparan sus armas contra el pueblo humilde y desarmado mientras el gobierno encubre y alienta estos crímenes a lo largo y ancho de la isla.

Con su empecinada voluntad de poder y es que solo se puede subyugar que ama y anhela tanto la libertad como no sea por la fuerza de las armas, la violencia, la represión los encarcelamientos injusto y cientos de miles de vidas humanas.

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