Lo dice el economista cubano, exiliado en EE.UU.
César Calero
LA NACION
"El legado político de Fidel Castro en cuanto a la reafirmación de la soberanía cubana será difícil de olvidar, pero la historia no lo absolverá por la destrucción de la economía del país y la violación de los derechos políticos, civiles y humanos de su pueblo."
El que lo afirma es Carmelo Mesa-Lago, economista y académico cubano exiliado en Estados Unidos, en respuesta al famoso alegato del líder cubano, "La historia me absolverá", después del fallido asalto al cuartel Moncada, de Santiago de Cuba, en julio de 1953.
Crítico del castrismo, Mesa-Lago, que abandonó la isla en 1961, considera que el embargo impuesto por Estados Unidos a Cuba hace casi medio siglo sólo ha servido para darle una coartada ideológica a Fidel Castro y para encubrir sus errores. Este catedrático emérito de la Universidad de Pittsburgh, Pensilvania, se confiesa keynesiano de la primera hora y cree que la crisis económica actual ha probado que las tesis del neoliberalismo "son una falacia". Consultor de instituciones como la Cepal o la OIT y asiduo de universidades de medio mundo, Mesa-Lago respalda a pie juntillas la reforma sanitaria que impulsa el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
?Usted siempre sostuvo que el embargo impuesto por Estados Unidos a Cuba sólo ha servido para darle una coartada ideológica a Fidel Castro. ¿Cree que el presidente Barack Obama debería derogar el embargo?
?Sí, afirmé eso hace 40 años y mantengo ese criterio. Obama ha dado pasos positivos, como la suspensión de las restricciones impuestas por Bush a los viajes y al envío de remesas. Otras medidas aconsejables serían el restablecimiento de los intercambios académicos, artísticos, religiosos y deportivos, y eliminar a Cuba de la lista de países terroristas, como se hizo con Libia. Pero la derogación del embargo requiere la anulación de la ley Helms-Burton por el Congreso, y ésa no sería una batalla fácil. Del otro lado, Fidel ha boicoteado el proceso de distensión y aunque Raúl Castro ha expresado varias veces que está dispuesto a discutirlo todo con Obama, también ha advertido que Estados Unidos no puede intervenir en los asuntos internos de Cuba, descartando en la práctica el tema de los derechos humanos.
?Fidel Castro acaba de cumplir 83 años, pero hace tres que ya no está en el poder. ¿Cree que se recordará su legado?
?Su legado político en cuanto a la reafirmación de la soberanía de Cuba y su papel internacional de esa pequeña nación será difícil de olvidar, pero la historia no lo absolverá, por la destrucción de la economía del país y la violación de los derechos políticos, civiles y humanos de su pueblo.
?¿Cuál es su percepción del momento actual de la isla?
?Considero que 2009 será el peor año en Cuba desde la crisis que siguió al colapso de la URSS. El gobierno ha estimado un crecimiento para este año del 1,7%. En mi opinión, habrá un crecimiento menor al uno por ciento. La crisis no ha llegado al extremo de 1993-94 por tres razones: Chávez suministra el 65% del petróleo necesario a un precio subsidiado equivalente a US$ 2500 millones, paga US$ 5000 millones por 40.000 profesionales cubanos que trabajan en Venezuela, y el 65% de los cubanos reciben remesas externas. Ninguno de esos factores existía a comienzos de los 90.
?El denominado "socialismo real" sólo cuenta ya con algunos vestigios, como Cuba. ¿Por qué cree que fracasó como alternativa al capitalismo?
?El llamado "socialismo real" es un eufemismo. El sistema fracasó porque ahogó la iniciativa individual, impidió la descentralización de las decisiones económicas, fomentó la ineficiencia y el desperdicio y violó las libertades civiles y políticas, así como los derechos humanos.
?Estamos viviendo la enésima crisis del capitalismo. ¿Cree que las doctrinas keynesianas son más apropiadas que el modelo monetarista imperante en los últimos años?
?Yo siempre he sido keynesiano, aún durante el auge exuberante del neoliberalismo. La crisis fue provocada por múltiples ilusiones: el mercado se controlaría a sí mismo, no era necesaria la regulación, la avaricia era el motor del crecimiento, los recortes de impuestos a los ricos favorecerían a los pobres (el goteo de Milton Friedman) y el Estado debería jugar un papel subsidiario. Los hechos han demostrado que todo eso era una falacia. El sistema podrá regenerarse siempre que introduzca las medidas necesarias para adaptarse a los nuevos retos, como hizo en el pasado. Ello demanda un nuevo sistema mundial de regulación de los mercados, con un mayor papel supervisor del Estado para controlar la irresponsabilidad de los bancos, de los emisores de acciones basura, de los estafadores y de la avaricia desmedida de los ejecutivos de las grandes empresas. O sea, un sistema en el que el Mercado y el Estado tengan un mejor equilibrio que en el último cuarto de siglo.
?¿Qué opinión le merece, como experto en sistemas de seguridad social, la reforma sanitaria que está impulsando el presidente Obama?
?Es una vergüenza que 50 millones de estadounidenses carezcan de cobertura de salud y que varios millones más tengan planes inadecuados. Estados Unidos sufre una enfermedad crónica que demanda una cura drástica y rápida, y Obama ofrece la receta.
El personaje
CARMELO MESA-LAGOEconomista y profesor cubano
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