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La secretaria estadunidense de Estado, Condoleezza Rice, descartó hoy que su país esté preparado para flexibilizar el embargo comercial a Cuba, luego que el gobierno de la isla pidió relajar las restricciones por la devastación del huracán Gustav. "No creo, en el contexto que vemos ahora, que levantar el embargo fuera inteligente", dijo Rice este domingo, durante su visita a Marruecos, en la parte final de su gira por el norte de Africa. La cancillería cubana pidió el sábado una flexibilización del embargo mantenido contra la isla desde hace más de 40 años, para permitir que compañías estadunidenses abran líneas de crédito para la importación de alimentos, ante el impacto de Gustav y la amenaza de otros huracanes. Si Washington tiene voluntad de cooperar, "se le solicita que permita la venta a Cuba de materiales indispensables y suspenda las restricciones que impiden a las compañías norteamericanas ofrecer créditos comerciales privados a nuestro país para comprar alimentos en los Estados Unidos", indicó el gobierno cubano. En sus declaraciones, Rice recordó que el presidente George W. Bush ha sostenido que Estados Unidos sería receptivo sólo "a un régimen cubano que esté preparado para liberar prisioneros políticos (y) tenga un proceso para tener elecciones libres y justas". "No vemos nada que sugiera eso", señalo la secretaria de Estado. El huracán Gustav azoto la parte oeste de Cuba el pasado 30 de agosto, provocando fuertes inundaciones y daños a más de 140 mil viviendas. El retirado líder cubano Fidel Castro escribió en la prensa oficial el pasado miércoles que Gustav había golpeado a su país como una explosión nuclear, al estimar que se requerirán entre tres o cuatro mil millones de dólares para enfrentar la emergencia. |
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