Por Roberto de Jesús Guerra Pérez y Magaly Norvis Otero Suárez/
Hablemos Press.
Camagüey, 29 de noviembre. --Una comisión nacional del gobierno cubano,--compuesta por un hombre y dos mujeres--, entregó licencia extrapenal (el pasado martes 24 de noviembre) a Francisco Hernández Fernández, el camagüeyano que se declaró en huelga de hambre, el 22 de julio en la cárcel Cerámica Roja, en Camagüey.
A pesar de que Francisco Hernández, fue torturado por los carceleros
de Cerámica Roja, desatendido por los médicos del hospital Amalia
Simoni, engañado por oficiales de la Seguridad del Estado, al
prometerle un juicio justo, cuando tenía 85 días de plante, continúo
su huelga exigiendo justicia.
A Francisco Hernández se le acusa de haber amenazado por teléfono a su mujer, quien estaba con él, y a la vez con el mismo policía que lo detuvo y llevó a prisión". Un tribunal de Camagüey lo condenó, el 8 de
octubre, a 4 años de cárcel por el delito que se le imputaba.
Francisco continúo la huelga alegando que es inocente. En conversación
por teléfono declaró que fue una comisión de La Habana, y después
mandaron a un coronel a verlo. "Él me planteo una extrapenal porque el
proceso sigue en investigación".
Francisco respondió a las siguientes preguntas:
¿Ya estás en la calle?
Si, ya estoy en la calle. Denle muchas gracias al mundo por lo que
hicieron por mí.
¿Te dieron algún documento?
Sí, me dieron la extrapenal. Creo que mañana tengo que ingresar de
nuevo porque no me siento nada bien. Pero ya saben, esto es pidiendo
justicia.
¿La comisión que te fue a ver es del Consejo de Estado?
Una comisión de La Habana, no sé si eran del Consejo de Estado.
¿Cuántos eran?
Eran tres, un militar y dos mujeres civiles.
¿Y qué te plantearon?
Hacerme un juicio nuevo, pero el juicio no puede ser, porque la ley
dice que cuando se lleva a un hombre incapacitado a un tribunal, ese
tribunal no puede sancionarlo dos veces. Que es la libertad, lo que
tienen que darle. Esto lo están dilatando porque le dio la gana. A mí
me llevaron con 85 días de plantado y en silla de ruedas a juicio.
¡Tu decisión era morirte o que te liberaran!
Si, imagínate tú. Todo este tiempo estuve con un asedio tremendo de la
gente de la Seguridad del Estado.
Un teniente coronel de la Seguridad del Estado fue el que mandó a
presentarme a juicio así plantado. El 23 de noviembre lo boté de la
sala antes de dejar la huelga.
¿Cuantos días estuviste sin comer?
Estuve creo que 121 días plantado, pero mi familia me dice que son 125
pues comencé el 22 de julio. Esto con una extrema seguridad, era
terrible. No dejaban llegar a nadie allí. Lo que pasé fue peor que el
infierno de Dante.
¿Cómo te sientes en estos momentos?
Me siento muy mal, creo que voy a tener que ingresar. Me estuvieron
poniendo suero desde el día antes de desplantarme.
¿Cuánto estas pesando?
Estoy pesando ahora 58 kilo, y mido 1,76. Pero la huelga me llevó a 41
kilogramos.
¡Deseas enviar algún mensaje a las personas que estuvieron al tanto de
tu situación!
Quiero decirle a la Comunidad Internacional y agradecerles a ustedes
que no pararon en la divulgación que les agradezco mucho. Que me
siento muy comprometido, que de ahora en lo adelante mi lucha será por
los derechos humanos. Soy opositor político. Se me trató así, como un
opositor.
Aclaro que me realizaron el juicio como un opositor. Un cordón de la
seguridad en el hospital era enorme, no dejaban entrar ni a mis
familiares, a nadie. Fui declarado opositor por ellos en el juicio por
mis manifestaciones en reclamo de justicia.
Pero se lo dije al coronel de la Seguridad del Estado, si no me dan la
libertad, si no revisan bien los papeles, la huelga volverá y es hasta
morirme porque soy inocente y lo sabe todo el mundo, todo el mundo en
Camagüey lo sabe, toda la policía sabe que soy inocente.
En esta semana creo que viene el compañero de La Habana que está
atendiendo el caso. Y todo en mi caso son violaciones, todos ellos
tienen que caer preso. El tribunal que me sancionó, más los policías
que son varios que me llevaron ilegalmente a juicio. Todo eso tiene
que conocerlo el mundo, y al mundo le debo estar vivo aquí hoy en día.
Porque si no me hubiera muerto.
Me mandaron 5 días para una celda de castigo en Cerámica Roja y me
dejaron sin agua. Sabiendo las enfermedades que yo tengo. Aquello fue
horrible.
Es una lástima no tener una cámara para grabar aquellas escenas. Una
celda sin cama, sin colchón, sin agua, y yo presento una bronco
astasia, que fue lo peor.
En el hospital Amalia Simoni, a veces me retiraban los sueros para que
desistiera, porque no le interesaba mi caso. Por poco me muero.
Cuando me llevaron a juicio me alteraron los signos vitales. Lo
alteraron todo, eso tiene que conocerlo el mundo y hasta que no haya
justicia yo voy a seguir hablando.
Le plantee mi situación, que renunciada a mi ciudadanía cubana. No
quiero vivir más en este país lleno de violaciones, de lo contrario
seré el opositor más grande que ha dado esta tierra. Y yo si soy un
líder. A ellos no les conviene que un hombre como yo sea la cabeza de
un grupo opositor. Porque soy atrevido, soy pacifista, pero con la paz
voy desafiando lo que me pueda pasar aunque tenga que volver a la
cárcel. Pero será bajo huelga de hambre. Me le voy a morir. El mundo
se va a enterar y no quedarán sin castigo porque lo que reclamo es
justicia...
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