WASHINGTON (Reuters) - Un panel de la Cámara de Representantes de Estados Unidos votará la próxima semana un proyecto de ley para distender el comercio y los viajes a Cuba, mientras los demócratas luchan por reducir las barreras antes de las elecciones legislativas en las que arriesgan perder su mayoría.
La Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara baja fijó para el próximo miércoles una votación del proyecto de ley. Pero incluso si la comisión lo aprueba, hacer que la medida sea aprobada por ambas cámaras es una tarea compleja con tan poco tiempo restante y la carga de trabajo pendiente.
De ser aprobada, la legislación levantaría el veto estadounidense a los viajes a Cuba y removería los obstáculos a las ventas de alimentos a la isla.
Una amplia coalición de grupos agrícolas, empresariales y de derechos humanos apoya la legislación y cree que sería una medida importante hacia el fin del embargo de casi cinco décadas impuesto a la isla de Gobierno comunista.
Si los republicanos recuperan el control de la Cámara baja en las elecciones del 2 de noviembre, algo que muchos creen es posible, se complicarían las posibilidades de cambio en el 2011 porque muchos republicanos de alto rango se oponen a distender el embargo.
Pero también hay algunos que se oponen a levantar la prohibición de viaje entre los demócratas, que actualmente son mayoría en ambas cámaras, lo que ha ayudado a retrasar una acción hasta el momento.
La medida fue aprobada por la Comisión Agrícola de la Cámara de Representantes en junio. Si es aprobada el miércoles por la Comisión de Asuntos Externos, pasaría a la sala de debate de la Cámara baja, pero eso probablemente no ocurrirá hasta después de las elecciones de noviembre.
La iniciativa también deberá ser aprobada en el Senado. Si no logra superar alguno de esos obstáculos, los legisladores tendrán que comenzar desde cero en el nuevo Congreso.
El presidente Barack Obama ha dicho que quiere "relanzar" las relaciones con Cuba, y el año pasado retomó los esfuerzos por acercarse a la isla. El redujo los límites a los viajes de miembros de familias separadas y las remesas de dinero por parte de cubano-estadounidenses a sus parientes.
Los defensores de mejores relaciones de Estados Unidos con Cuba esperan que Obama vaya más allá.
(Reporte de Susan Cornwell; Editado en español por Carlos Aliaga)
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