La Hora - En la sede de las Naciones Unidas, se reunió la Internacional Socialista y aprobó, por unanimidad, el informe de su comisión que visitó Venezuela, con el fin de conocer en el terreno lo que allí acontece.
En ese documento quedó señalado que la democracia está amenazada por un régimen autoritario que utiliza, descaradamente, las instituciones del Estado para acabar con la propia democracia; se recomienda respaldar a los sectores que luchan para que cambie la peligrosa situación.
¿Estos pronunciamientos tendrán eco en los seguidores de lo que llaman socialismo del siglo XXI?
La acreditada revista Foreign Policy publicó la nómina de los 23 peores tiranos del planeta, entre los que figuran los autócratas de Corea del Norte, Zimbabue, Birmania, Sudán y El Congo; también constan Hugo Chávez y Raúl Castro, cuya escabrosa senda no se debe imitar en Latinoamérica.
Sobre el venezolano se argumenta que en sus 11 años de gobierno ha encarcelado a dirigentes opositores y periodistas, extendido por tiempo indefinido los plazos de los mandatos y clausurado medios independientes. A lo que se añade el descalabro económico y social de ese país sumamente rico por su abundancia petrolera pero pésimamente administrado, lo que ocasiona desgobierno de conflicto y retraso.
Por su parte, el mandón cubano pertenece a una sanguinaria y reaccionaria dinastía que se encuentra, de manera vitalicia, apropiada del poder.
Los regímenes autoritarios frecuentemente desembocan en el despotismo, camuflados en agobiante y falsa propaganda; se declaran enemigos de la prensa pluralista con el propósito de acallarla e imponer el pensamiento de una sola vía, para que nadie reclame por los atropellos a las libertades y derechos ciudadanos.
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