Son despojados por las fuerzas de sus derechos más elementales, miembros del Partido Republicano de Cuba (PRC)

Por Georgina Noa Montes, periodista independiente. Hablemos Press.

Habana-Cuba. Son despojados por las fuerzas de sus derechos más elementales, miembros del Partido Republicano de Cuba (PRC), al serle impedido por los órganos represivos del gobierno, su participación en la misa que celebra la parroquia Nuestra Señora de La Merced, a las 4.00pm, este pasado 23 de Abril. Según informaron los mismos a esta reportera.

La delegación del PRC representada por el municipio de Arroyo Naranjo, ha convocado para los días 23 de cada mes, en memoria de Orlando Zapata Tamayo, preso político asesinado por el gobierno, a participar en la misa que se celebra en la antes mencionada iglesia. Esta actividad por dos mese consecutivos, ha sido frustrada debido a las violaciones de los derechos humanos cometida por oficiales del Departamento de la Seguridad del Estado (DSE) y la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), al impedir que miembros del PRC y activistas de otras organizaciones no gubernamentales, se reúnan para juntos pedir por el descanso del alma del finado Zapata Tamayo, hizo saber Vladimir Calderón Fría director del PRC de Ciudad Habana.

Según Yohan Valladares Echevarria, director del mencionado partido por el municipio de Arroyo Naranjo: ``muchos opositores han sido detenidos, algunos llevados a las unidades de la PNR y metidos en calabozos por varias horas, otros sencillamente han sido obligados a retirarse del lugar, con la amenaza de ser encarcelados de seguir participando en la actividad; otros tantos son trasladados por estos oficiales en carros de los mismos, para dejarlos abandonados en lugares lejanos, solitarios y a veces desconocidos por estos sin importarles ni que sean mujeres´´.

A esta actividad trataron de llegar sin éxito miembros de las delegaciones de: Arroyo Naranjo, Guanabacoa, Regla, Centro Habana, Habana Vieja, Marianao y San Miguel del Padrón, dejo saber Julio Beltrán Iglesias, Director de ética en la región occidental del PRC, quien fuese abandonado en las afuera de ciudad Habana por oficiales de la policía política.