7/24/2009

Condenado a treinta años por carne de res.

Por: Magaly Norvis Otero Suárez, Periodista Independiente del Centro De Información Hablemos Press (CIHPRESS)


Foto: un cartel en una pared de la Prisión Toledo muestra una frase dicha por Fidel Castro, lo contrario de los centros carcelarios.


La Habana, Cuba, 23 de julio/Hablemos Press/ El recluso Juan Sánchez Ruiz, de 58 años de edad, a sufrido tres infartos en los 19 años que lleva recluido. Presenta una cardiopatía isquémica dilatada, además de ser hipertenso severo. Según cuenta vía telefónica a esta periodista, necesita de un tratamiento de medicamentos específicos y una atención especializada que no recibe en la Prisión de Quivicán.


Narra Sánchez Ruiz, “Fui juzgado por el Tribunal Provincial de Pinar del Rio por un delito de hurto y sacrificio de ganado mayor y sancionado a 30 años de prisión pero la salud ya no va conmigo. Me encuentro ingresado en la posta médica del penal hace casi 5 años. He solicitado una licencia extrapenal en varias ocasiones y me la niegan a pesar que tengo en mi poder todos los documentos que certifican mi estado delicado de salud. Yo solamente sacrifiqué una vaca y lo hice para alimentar a mi familia, no puse una bomba”.


Describe el reo que todos los meses hay que llevarlo a la consulta del especialista pero siempre está el problema con el transporte o con el personal encargado de conducirlo. El caso es que lo llevan cuando ya se encuentra descompensado, “requiriendo de un ingreso que se puede verificar en la sala de penados del hospital Julio Trigo las veces que he tenido que ser hospitalizado”.


Otro caso parecido es el de Adimir Martínez Puig, también encarcelado en la sala de penados que padece la enfermedad de cangrina hace más de un año. Ya perdió las dos extremidades inferiores; además que tiene cáncer en la garganta.


“Adimir fue sancionado por Tenencia Ilegal de Armas de Fuegos a 8 años de prisión y se encuentra en la misma situación que yo”, explica Juan Sánchez, y revela “se le han negado la licencia extrapenal en mas de una vez. No puede valerse por si solo. Los propios enfermos que nos encontramos en la posta medica somos los que le ayudamos”.


En nuestra patria, donde por mas de medio siglo ha imperado un régimen comunista que dice que el proletariado tiene el poder. Esta afirmación no constituye mas que una coartada para que una cúpula de privilegiados que someten a un pueblo entero bajo una dictadura totalitaria lo priven a uno de los más elementales derechos ciudadanos, expuso el Presidente y Fundador del movimiento “Clamor del Presidio” , preso en Quivicán.

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