1/14/2008

Un año a pie y con Liborio

Juan González Febles

LA HABANA, Cuba, enero, (www.cubanet.org) -El año 2007 concluye con sus aportes. Los aportes del año en términos de decir popular, son ilustrativos sobre la dirección de la política cubana en Cuba. Echemos un vistazo a los más representativos:

-¿Qué se trae esta gente?
-Qué se cree esta gente?
-¿Hasta cuando hay que aguantar a esta gente?
-¡Lo de esta gente es mucho!
-¡No puedo con esta gente!
-¡Hasta donde nos van a llevar!
-¡Esto es mucho con demasiado!
-¿Se muere o no?
-¡Hay que irse!
-¡Hay que montarse en algo!
-Cuando Raúl dé la leche (para referirse a lo que no sucederá)
-Con Carlos y punto.

Para no hacer interminable la lista, nos quedamos con esta muestra representativa de lo más escuchado, específicamente en las paradas de ómnibus, agromercados, etc.

Durante 2007, aunque hubo una significativa mejora en términos de respeto al sentir popular, con muy pocos discursos y la esperanza cierta de librarnos definitivamente de ellos, el debate político se desplazó del pueblo de a pie, a los intelectuales. Sólo a ellos les importa discutir la sobrevivencia o no del actual proyecto político. Al pueblo no le interesa. Ya existe consenso. No se trata de proyectos más o menos. Se trata de los que Liborio bautizó como ‘esta gente’. Cualquier cosa que los incluya, es mala por definición.

Se trata de que para el ciudadano de a pie, la discusión política no aborda este u otro sistema. La cuestión medular es que si participa ‘esta gente’, hay que irse. En otros términos: No funcionará.

El desapego de las grandes mayorías por los proyectos políticos, contrasta con la fe creciente en la oposición interna. Esta no es identificada a nivel popular como una corriente política tradicional. La gente de a pie llama a esta oposición ‘gente de los Derechos Humanos’. Según el sentir popular, la ‘gente de los Derechos Humanos’ esta ‘fajada’ con el gobierno para que todo cambie, pero ¡no son políticos! Son…otra cosa.

El año 2007 cierra con una tendencia popular hacia el apoliticismo. Este rechazo a la práctica política, al ejército y a los cuerpos armados en línea general, los acerca a agrupaciones como Damas de Blanco y a los periodistas independientes, llamados indistintamente ‘periodistas de los Derechos Humanos’ y punto.

Encuestas realizadas a nivel popular, señalan como los políticos opositores más populares por orden a: Elizardo Sánchez Santacruz, Marta Beatriz Roque Cabello y Vladimiro Roca Antúnez. Aunque no se les reconoce categoría política. Sólo son los principales de ‘los Derechos Humanos’.

Ellos deben su popularidad a los ataques y la descalificación a que han sido sometidos a lo largo de los años. Ser atacado por Granma o por Mesa Redonda aporta grandes parcelas de popularidad hoy día en Cuba.

La participación que han tenido en la defensa de personas desconocidas de a pie, les convierten en referencia.

Ya se hace común que un abusado sin nombre apele en su desesperación a amenazar a las autoridades, con avisar a ‘la gente de los Derechos Humanos’, específicamente a Elizardo Sánchez Santacruz, a quien se quiso denostar llamándole ‘Camaján’.

En su caso, el pueblo se apropió del sobrenombre y lo hizo suyo. El saber popular lo consagró. Es ‘El Camaján’, alguien que sabe mucho. Alguien que defiende a los presos y a los que nada tienen. Alguien que no teme a ‘esta gente’. Entre un pueblo que rinde culto al valor personal, saquen ustedes sus propias conclusiones, sobre el grandísimo favor que Granma y Mesa Redonda con sus ataques descalificadores, hizo a este y a otros insignes luchadores civiles.

Al general Raúl Castro, tolerado en mayor o menor medida, le falta mucho por recorrer para disponer de una parte del respeto y la aprobación ganado, por citar un ejemplo, por las Damas de Blanco.

Producto del trabajo sistemático realizado por los grupos de trabajo consagrados a modelar la opinión al servicio del gobierno, el exilio político es el factor de menos peso para la opinión popular. La gente de a pie simpatiza más con los estadounidenses, ‘los yumas puros’, que con los políticos cubanos exiliados. Cuestión de lenguaje y por supuesto, de mensaje.

Hay que hacer la excepción de los más execrados por la propaganda. Estos son: Hubert Matos, Rafael del Pino, la Sra. Ileana Ros Letinehn, llamada ‘La Loba’ por los medios al servicio del régimen y el Sr. Lincoln Díaz, satanizado por el régimen de forma muy irrespetuosa como ‘El Búfalo’,

En contrapartida, en el caso de la Sra. Ros, la gente de a pie, la rebautizó como ‘La Lobita’. Familiares que residen en Miami han ayudado a salvar esa imagen en Cuba. Inexplicablemente la Señora no es impopular en el patio. Se trata de una mujer exitosa y capaz de golpear con éxito al Comandante. Esto es algo que el pueblo de Cuba no pasó por alto y definitivamente la ayudó. Otro de los populares, el Sr. Lincoln Díaz es reivindicado por el pueblo, por las mismas razones por las que despierta simpatías un galán de cine o televisión. Además de esto, el Sr. Díaz Balart también se ve beneficiado por eso que ya podríamos calificar como ‘el efecto Mesa Redonda’. Si alguien ‘pesado’ como el Sr. Lázaro Barredo le ataca, el Sr. Díaz Balart tiene que ser simpático.

El año 2007 concluye con una caída en picado del régimen en términos de credibilidad y prestigio a nivel popular. La palabra que define todo es una: cansancio.

jgonzafeb@yahoo.com

No hay comentarios:

Links







Abrir en una nueva ventana

.

.

FIRMA