Noa Montes, residente en calle 1ra, No 24, entre A y Calzada, de Bejucal, reparto Rosario, fue recibida por otros dos oficiales del mismo órgano represor que se identificaron como Omar y Carlos y fue severamente amenazada de ir a prisión si mantenía la convocatoria de la Liga Cívica de participar todos los viernes a las 6:30 de la tarde en la Santa Eucaristía, celebrada en la Iglesia Nuestra Señora del Carmen, en Infanta y San Lázaro, municipio Centro Habana, pidiendo por la Libertad de todos los presos políticos.
Además, dejaron ver que todo el hostigamiento y campañas difamatorias recibido por su hija en su centro de trabajo eran una práctica más de la intolerancia gubernamental a la postura contestataria de su madre; a pesar de que la joven se mantiene al margen de la situación, las amenazas abarcaron todo el marco familiar.
La opositora es hipertensa y el carácter agresivo de la conversación le trajo como consecuencia altas cifras de tensión arterial. "Yo sigo con la iniciativa aunque está en juego la integridad familiar y mi libertad", concluyó.
Miscelaneas de Cuba
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