El Embargo
Hoy ha salido publicado en La Nueva Cuba, la excelente intervención de Jaime Suchlicki, Director Instituto de Estudios Cubanos y Cubano-Americanos de la Universidad de Miami, ante el Comité de Finanzas del Senado de Estados Unidos, sobre las consecuencias de la eliminación del embargo de EE:UU sobre Cuba.
Esto me ha movido a escribir estas líneas, basado en mis propias consideraciones y experiencias sobre esta controversial medida.
Cuando el Presidente del Sub Comité de Relaciones Internacionales del Parlamento de Canadá, me preguntó sobre mi posición acerca del embargo, conteste que era una medida sin sentido en este momento.
Pero dije que, el verdadero embargo en Cuba, lo tiene la cúpula comunista sobre la sociedad cubana. Que el embargo había afectado a Cuba dos o tres años después de 1963, cuando las reservas estatales de mercaderías, piezas, maquinarias y partes americanas, se agotaron en los almacenes del Estado.
El propio dictador – con su arrogante tono prepotente - dijo en un discurso en los años setenta, que los EE:UU podrían mantener el embargo por cien años, que no le haría nada a Cuba. Se sentía apoyado por la URSS y el campo socialista y, por la división de opiniones en Europa, Canadá y otros países, sobre esa medida unilateral de Estados Unidos.
Lo que no me preguntó fue, sobre qué bases se podría levantar el embargo. O sea, ¿qué daría la cúpula comunista a cambio de retirar esa medida? ¿Estaría dispuesta esa mafia corrupta y asesina, a realizar elecciones libres, bajo supervisión internacional? ¿Estarían dispuestos a soltar a todos los presos políticos? ¿Aceptarían la existencia de los partidos democráticos y opositores al modelo comunista? ¿ Respetarían los derechos humanos y los Pactos de Naciones Unidas sobre estos derechos, de manera real y bajo el sistema de inspección de la ONU, Amnistía Internacional y otras organizaciones internacionales que velan por estos derechos?
Esas serían las únicas y legítimas bases para obligar al dictador a levantar el embargo contra la sociedad cubana, el verdadero y real, y sería suficiente para que el Gobierno de EE:UU suspenda el falso embargo sobre la isla.
Y digo falso, porque Cuba está comprando cientos de millones de dólares en mercaderías en Estados Unidos y, hasta la fecha a gastado mas de 2,000 millones en esas compras.
Pero…¿porqué F. Castro no compra todo lo que desea en Canadá, España, Brasil, Japón, Italia y otros países, que no tienen “embargo” contra la isla?
Es simple: no tiene un centavo y, le debe a las once mil vírgenes y a cada santo un millón de dólares. Toda la economía cubana está en una profunda bancarrota, y toda la responsabilidad recae en este charlatán fanfarrón y su círculo de orates y guatacas.
Estoy totalmente de acuerdo con el Profesor Suchlicki en su aseveración de que el levantamiento del embargo sólo fortalecerá a las brutales estructuras de dominación e impunidad de la Mafia de La Habana y, no beneficiará en nada al pueblo de Cuba.
Por otra parte, sería un reconocimiento al ilegítimo gobierno de la isla, que se ha prolongado por medio siglo, a base del terror y la represión más feróz que se conoce en América Latina.
Levantar las restricciones de los viajes a Cuba, tampoco ayudaría en nada a la sociedad cubana. La experiencia del “Constructive Engagement” de Canadá – país donde vivo – no ha tenido ningun efecto en el mejoramiento de los derechos humanos ni en las condiciones de vida de la población. Por el contrario, la represión bajo Raúl Castro, contra las fuerzas democráticas deja, día tras día, brutales huellas de su furia. Cada año, más de 600 mil canadienses viajan a Cuba y dejan cientos de millones de dólares en su estancia. Pero la miseria y la pobreza se ensañan sin compasión sobre la población cubana. Las inversiones canadienses no han movido ni un milímetro las posiciones dictatoriales y de absoluta impunidad de las autoridades cubanas. Sólo benefician a Canadá, que tendrá que enfrentarse, más temprano que tarde, a las reclamaciones de los trabajadores cubanos y del Estado de la República de Cuba, por su complacencia con la dictadura comunista de la isla.
Otros Asuntos
El Bufón de la Casa Real Habanera, Pérez Roque – si, el mismo que quiere formar la Confederación Chavista – ha declarado que Cuba firmará los Pactos de la ONU sobre Derechos Humanos.
¿Quién le podría creer al imperio policíaco-militar de La Habana, que ha estructurado e institucionalizado el más salvaje y repugnante sistema de violación de los DD:HH durante media centuria, de que van a cumplir con esos pactos?
El mismo dia 10, Día de los Derechos Humanos – en el que habló el Bufón - desataron una vastísima represión contra el movimiento disidente y opositor en toda la isla. Días antes, asaltaron a punta de pistolas y fusiles, a la iglesia Santa Teresita, en Santiago de Cuba, para evitar una vigilia y una misa por un prisionero político.
Como he escrito en otro artículo (Ver “Raúl Castro y las expectativas”), se trata de una vulgar jugarreta para ganar tiempo tanto en el plano nacional como internacional.
Hace más de un año de la sucesión imperial. El tiempo está pasando y nada ha ocurrido. No cambios, sino, mayor terror y represión. Raúl Castro dijo que “todo está atado y bien atado”. Pero cuando un pueblo se decide a conquistar sus derechos y libertades, no hay ejercito, policía, contrainteligencia o Seguridad del Estado que pueda aguantar ese arrebato airado. El polvorín puede estallar en cualquier momento. Ellos lo saben y sería un suicidio reprimir a sangre y fuego las ansias de democracia, libertad y justicia de la nación cubana.
Finalmente, las últimas declaraciones del Dictador. Dijo que no se “aferra a cargos”. Un individuo que ha estado cincuenta años en el poder. Su cininismo no tiene límites. Es otra de las jugarretas, que aún nos faltan por ver, para crear más ilusiones. Ese paso estaba planeado desde hace mucho tiempo. Es parte de lo “atado”.
Un abrazo, Feliz Navidad y un Próspero Año Nuevo, para todos mis lectores.
Asdrúbal Caner Camejo
Representante del PSC
en Canadá
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